Al calor de Lawrence

Anda que no se ha hecho largo el invierno. Parece que con la llegada del ciclismo hasta vuelve al calor, por lo menos aquí en Murcia en donde los 20 grados amenazan con no abadonarnos en este caluroso mes de enero. Será por eso que José Joaquín Rojas se ha aclimatado tan bien al bochorno que pega por estas fechas allá por Australia. El ciezano ha sido segundo el el primer sprint del año, por detrás del aussie Mark Renshaw. El sprinter del Caisse D´Epárgne avisó de que llegaba corto de preparación a esta primera cita del año pero ya se sabe que los velocistas necesitan muy poco para encontrar sensaciones. Rojas vuelve a conseguir un buen puesto pero, de nuevo, se queda a las puertas de la victoria. Esa fue la dinámica en 2007. Muchos lugares de honor pero un sólo triunfo, en Las Torres de Cotillas, en la Vuelta a Murcia. No está mal para un corredor de su edad pero no conviene que se obsesione con la victoria, como le ocurrió a Samuel Sánchez en sus primeros años como profesional. Llegará.

Arrancó el Tour Down Under. Lo hizo por décima vez. No podemos decir que sea la prueba más joven del ProTour, ya que la crono por equipos de Eindhoven le gana la partida de largo, pero si que se puede afirmar que por primera vez una prueba de esta liga se disputa fuera de Europa. La UCI nos quiere vender este acontecimiento como el nacimiento de una nueva era. El día en el que el ciclismo alcanzó la globalización y comenzó a dar grandes pasos fuera del viejo continente. Lo cierto, es que la alianza Down Under - UCI es una relación de simbiosis en la que los dos salen beneficiados. Los cuáqueros de McQuaid consiguen que su liga comience dos meses antes, palían un poco la marcha de Giro, Tour y Vuelta del ProTour y hacen un poco más de caja y los australianos ganan una participación con la que ni hubieran soñado cuando idearon esta competición hace una década. A favor de los organizadores hay que romper varias lanzas. Desde le principio, ésta fue una prueba seria. Los recorridos están diseñados muy de antemano, los coreredores reciben un trato excepcional y los detalles se cuidan. La web oficial es una de las mejores de cuantas carreras se disputan en la temporada y la canción oficial "Feel the Rush", da mil vueltas al "Corazón Congelado" o a las panochadas de últimos años estilo "Soy un lunático". Se merecen este ascenso de categoría pero no por ello comienzo a creer en el ProTour, una liga muerta, en la que las mejores pruebas del mundo se han bajado con el motor en marcha.

En lo meramente deportivo, el Tour Down Under se suele dar muy bien a los corredores de la tierra. De las nueve ediciones pasadas han vencido en cinco ocasiones. Dos con Stuart O´Grady, una con Michael Rogers, otra con el ya retirado Patrick Jonker y la última, hace dos ediciones, con Simon Gerrans. O´Grady y Gerrans repiten participación, aunque quizá lo más destacado es que en cuatro ocasiones el vencedor ha sido un corredor del conjunto AG2R y, además, han sido cuatro ciclistas distintos. Gilles Maignan, el mencionado Gerrans, Martin Elmiger y Mikel Astarloza se han alzado con el maillot amarillo australiano defendiendo los colores del equipo de la aseguradora gala. Además de Astarloza otro español sabe lo que es triunfar en esta prueba. Luis León Sánchez se hizo con la general hace unas temporadas. Los dos repiten participación.

Estadísticas aparte, el Down Under es una competición en la que se solía perfilar la general en los primeros días. Una fuga consentida tomaba ventaja y los directores permitían que todo se jugara entre los integrantes de ese grupo. Lo temprano de la temporada y el intenso calor propiciaban que fueran pocos los dispuestos a esforzarse a tope desde pleno mes de enero. Sin embargo este año con la llegada de los equipos punteros del panorama ciclista, parece que la general será más luchada y que habrá más candidatos a la victoria.

Hasta en Francia se hacen eco de esto. Uno de los temas más tratados en este blog comienza a ser más que preocupante. Que Manuel Lloret, Juanmi Mercado o Dani Moreno estén sin equipo son signos de crisis profunda.