viernes, noviembre 17, 2006

La vuelta de un clásico

Quizás a muchos no suene el nombre de Simone Biasci pero no exagero si digo que estamos ante uno de los casos de ciclista más extravagantes del ciclismo mundial. El italiano dio el salto a profesionales en 1994, cuando contaba 24 años, en las filas del equipo Mercatone, una de las escuadras más potentes del panorama ciclista de por aquel entonces. El cuadro de Salutini se caracterizaba ante todo por contar con Il Bello Mario Cipollini y por su "treno rosso" que llevaba en volandas al sprinter en las llegadas masivas de cualquier carrera en la que tomasen parte.

Ese mismo año, Biasci lograba su primera gran victoria. El italiano consiguió el triunfo en la séptima etapa de la Vuelta a España, después de meterse entre pecho y espalda una fuga de 258 kilómetros acompañado por el español de Castellblanch Antonio Miguel Díaz. Los dos saltaron en el kilómetro dos de la etapa y se plantaron en la meta de Alicante después de colaborar a la perfección durante una larga jornada que atravesaba toda la geografía murciana. A Maximino Pérez, director de Castellblanch, no sentó nada bien la victoria del italiano, por lo que ni corto ni perezoso chafó la bici del vencedor de etapa con su coche de equipo, pasando repetidas veces por encima de ella.

Ese día el ciclista de Pontedera se dio a conocer en el pelotón internacional y muchos fueron los que comenzaba a augurar un gran futuro a un corredor valiente y que se salía de la tónica de lanzadores de su equipo. Sin embargo, el año siguiente supuso un paso atrás en la carrera de Biasci, quien no logró victoria alguna, a pesar de buscar con ahinco lucimiento en multitud de fugas.

El 96, el año del Tour de Riis, fue la mejor temporada de Biasci entre los profesionales. El equipo Mercatone Uno había pasado a denominarse Saeco, aunque la licencia de la escuadra seguía curiosamente establecida en San Marino. Biasci se asentó por fin en la categoría y fue en España, en donde consiguió su primera victoria, cuando este valiente nos deleitó con alguna de sus mejores actuaciones. Consiguió una victoria en la Bizikleta Vasca y otra en la Vuelta a Asturias, destacando sobre todo esta último. Biasci venció en la última etapa de la ronda asturiana con llegada en Oviedo, pero previamente había sido segundo en otras dos jornadas. El día en que David Etxebarría se llevó el triunfo de la cuarta etapa, este italiano nos sorprendió con un descenso bajo la lluvia de los que no se olvidan fácilmente. Konyshev y Savoldelli son de los pocos que han conseguido marcarme más en una bajada que el Biasci de aquel día. Como premio llegó su plaza en el equipo del Tour, en donde buscó un triunfo que no llegó a pesar de ser protagonista en diversas fugas.

A pesar de la buena temporada, Saeco no renovó a Biasci y el italiano puso rumbo a Kross Montanari, el conjunto que hoy día es Selle Italia. Allí no encontró la regularidad de años anteriores y esta promesa del ciclismo transalpino abandonaba el profesionalismo con sólo 27 años.

El gusanillo de Biasci seguía vivo, así que se dedicó a competir en las "Gran Fondo" italianas, que equivalen a las marchas cicloturistas españolas, pero en las que los mejor preparados compiten por equipos y cobrando un buen dinero. Hace poco, Meta2Mil dedicó un reportaje a este tipo de pruebas, en el que se explicaban los entramados de estas carreras a mitad de camino entre la marcha y la competición. Tan bien le fue a Biasci que estuvo viviendo de ello varios años.

Las aventuras de este italiano no acaban con las marchas cicloturistas, ya que Biasci es todo un habitual en las pruebas sudamericanas. Desde 2003 ha participado sin falta en cuatro ediciones de la Vuelta a Cuba e incluso en 2003 se atrevió con la Vuelta a Uruguay. Mitad aventura, mitad competición, Biasci viajaba para hacer las Américas y además conseguía volver siendo protagonista de las carreras. Tres victorias de etapa en Cuba atestiguan esto.

Pues bien, el año que viene Biasci vuelve a ser profesional. El conjunto italiano Endeka contará con el corredor de 36 años para aportar veteranía a una plantilla joven que afrontará el calendario continental con la mayor de las ilusiones. A su lado habrá de todo, desde veteranos como Igor Pugaci, hasta el iraní Ghader Mizbhani, un gran conocido para uno de los visitantes de este blog. Diez años después, el de Pontedera volverá a competir entre los profesionales. No creo que se haya dado otro caso igual -obviando los periodos de entreguerras- por lo que Biasci ya es noticia antes de subirse a la bici.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues si Andres el Irani es un corredor que sigo desde que se ve en las carreras asiaticas, a ver que tal se mueve en Europa !! Si dan al equipo un calendario que sea mejor que el de este ano !!

Que el Endeka no pudo hacer mucho este ano !! Preguntar a Sergio Cuesta como le ha ido este ano ... Vuelta a Navarra y poco mas !!!

Este ano fusionan con el equipo que llevava Biasci el Partizan Whristle y permite a muchos de los componentes de este equipo de Gran fondo de poder acceder a las carreras UCI : Pugaci que vuelve, Cavalli un clasico como Gurayev o Smirnov de las gran fondo.

Tambien Bazhenov tendra otra oportunidad despues de ser baja del Naturino !

Y seguiran compitiendo en Gran Fondo ...

Andrés F. Cánovas dijo...

Gracias por el comentario Biarnes. Esta gente son "adictos" a la bici. No entienden su vida sin ella y cuando lo dejen definitivamente seguirán ligados de un modo u otro a este mundillo.

Un saludo¡

Anónimo dijo...

Andres aqui te pongo el enlace sobre una cosita a proposito de Mizbani

http://www.cyclismag.com/article.php?sid=2813#rub

Andrés F. Cánovas dijo...

Gracias Biarnes