Gárate se desespera camino de Saltara

Llega la montaña al Giro y lo hace en fin de semana. El día propicio para enganchar espectadores después del aburrimiento de etapa que vivimos ayer. Salida de Cesena y llegada a Saltara después de 236 kilómetros, una distancia más propia de una clásica que de una etapa de ronda de tres semanas de estos últimos años.

El belga Rik Verbrugghe se hizo con su tercer triunfo parcial en el Giro de Italia. Los dos anteriores le habían reportado premios extra, como cuando venció en el prólogo del Giro llevándose de regalo la maglia rosa tras una gran temporada, con victoria en Flecha Valona incluída. Su equipo, Cofidis, partía esta mañana con sólo ocho corredores, tras el abandono por la alergia primaveral, de su líder Leonardo Bertagnolli. En el discurrir de la etapa veía como otro de sus hombres fuertes para esta carrera, Christian Moreni, también se iba para casa junto al belga Thierry Marichal. De este modo quedaban sólo seis Cofidis en carrera y parecía que todo se ponía cuesta arriba de aquí a la llegada a Milán. En cambio atacó de salida el belga Staf Scheirlinckx, dano presencia al conjunto francés en cabeza de carrera. Cuando por detrás se unieron otros nueve hombres, entre los que estaba Verbrugghe y en los que destacaba la presencia de Juanma Gárate, Scheirlinckx se vació en favor de su líder que después pudo rematar en la dura llegada a Saltara. Cofidis ya ha rentabilizado su presencia en el Giro.

La dura subida a Catria sólo sirvió para comprobar que este no será el Giro de Di Luca. Quizá no convendría descartarlo de antemano, pero el italiano ha llegado a meta desfondado, con la cara descompuesta después de aguantar el envite de Lampre en los últimos kilómetros de carrera. El equipo de Martinelli ha realizado unos últimos kilómetros de carrera que apunto estuvieron de abortar la fuga de Verbrugghe, Mori, Gárate, Vila y Peña. Una fuga en la que nadie ayudó a un desesperado Gárate, al que ni en su equipo apoyaron hoy para que luchara por distanciarse en la general. Los directores de Quick Step le decían al campeón de España que se centrara en la etapa. Increíble cuando hablamos de un corredor que ha hecho cuarto en el Giro y que de haber llegado con ventaba hubiera supuesto una amenza para los favoritos en días venideros. La diferencia del grupo ha llegado a ser de más de siete minutos, pero no había entendimiento porque Vila y Mori no han querido colaborar en ningún momento para defender a sus líderes.

Al final en la llegada a Saltara, donde se dió caza a todos los fugados menos a Rik , que aprovechó un momento de vigilancia entre sus compañeros para irse en busca de la etapa, se comprobó que Savoldelli está muy fino, que es el corredor más en forma en este Giro de Italia, que Basso está muy bien y sigue sin mostrarse pero estando a un paso del liderato, que a Cunego le falta un puntito, o al menos eso ha parecido hoy, que Simoni tampoco quiere mostrarse, que Rujano parece que se centrara en las etapas, (ha estado con problemas por una leve intoxicación), que Di Luca está muy tocado y que Jan Ullrich está muy picado con las declaraciones acusadoras de Rijs y se está marcando un buen Giro de Italia. Por cierto, Honchar de nuevo líder del Giro.

Mañana más espectáculo. No sabremos quien gana el Giro pero puede que sí quien no lo gana. Llegada al duro Passo Lanciano.

Fotos: Sirotti