viernes, noviembre 14, 2008

La vuelta de Manolo

Se ha convertido en uno de los chascarrillos más recurrentes de cada pretemporada. 'La vuelta de Manolo Sáiz'. Nunca se sabe a ciencia cierta de donde sale el rumor ni quién o quienes corren la voz de un regreso que, de momento, no es más que polvo en el viento. Que a Manolo le gustaría volver a subirse a un coche, o al menos dirigir desde detrás de una tupida mesa de despacho, no escapa a la razón de la mayoría de aficionados, periodistas varios e incluso ciclistas, al fin y al cabo aquéllos que deberían ser los actores principales de esta obra. Sin embargo, la vuelta no resulta tan sencilla. El cántabro no puede echarse a las carreteras por las buenas. Sáiz dejó el ciclismo, o le obligaron a dejarlo, en la cumbre, desde la cima, con uno de los equipos más potentes del panorama mundial y un peso específico en la mayoría de grupos de decisión de este deporte.

Principalmente por ese motivo se antoja más que complicada una vuelta que despertaría de su letargo a un soñoliento pelotón español. Ni ganando todo lo que se ponga por delante se consigue aumentar el espacio y la tinta dedicados al ciclismo. Manolo no puede volver desde abajo. No puede arrancar dirigiendo una formación de la llamada clase media, un término que en ciclismo incluso se queda grande en comparación con otras disciplinas. Si algún día vuelve a arrancar un vehículo con pegatinas ciclistas y colores vivos en su salpicadero, lo hará con un conjunto potente, con al menos un gran líder y con la pretensión de luchas por altas cotas.

Manolo no vuelve, por ahora, pero sí que lo harán en 2009 varios de los corredores que él ya dirigiera en sus últimos años en Liberty Seguros. Jesús Hernández, Javier Ramírez Abeja, y probablemente Óscar García Casarrubios, volverán al campo profesional después de una temporada en la que no les quedó mejor opción que recalificarse en amateur en el mejor de los casos. El caso más llamativo y el que más repercusión ha tenido en los medios es el del madrileño Jesús Hernández. Quizá porque es el único que no ha competido en 2008 o quizá porque su regreso se producirá en Astaná, uno de los mejores equipos del pelotón.

Jesús Hernández debutó en profesionales en el seno de Liberty Seguros, en la temporada 2004. En sus dos años junto a Manolo Sáiz dejó claro que su terreno iba a ser la montaña. Sin embargo, la misma paciencia que se tuvo con otros no se tuvo con el de Parla. Hernández no fue renovado de cara a la temporada 2006, la de la llegada de los kazajos, por lo que se vio obligado a fichar por Relax, un conjunto en el que ganaría responsabilidad y debutaría en una gran ronda por etapas, la Vuelta a España. Su estreno se desarrollaba con muy buena nota. El madrileño había destacado en las jornadas de montaña y ocupaba una posición entre los veinte primeros de la general a la llegada a Andalucía. Todo cambió con una caída en la etapa de Calar Alto, la que acabaría venciendo en vizcaíno Igor Antón. Hernández decía adiós a la carrera pero volvería al año siguiente.

A Jesús le tocaría trabajar durante toda la campaña 2007. Francisco Mancebo, Óscar Sevilla y Ángel Vicioso habían transformado la fisionomía de un Relax que de buscar protagonismo en fugas lejanas, pasaba a luchar por las generales de carreras como País Vasco o Catalunya. Ninguno de esos corredores podría participar en la gran ronda española, por lo que de nuevo Jesús Hernández, acompañado por su paisano Dani Moreno, tomaba el mando del equipo de Suárez Cueva en la cita más importante del año. De nuevo una caída, y de nuevo en Andalucía, daría al traste con sus aspiraciones. Al final de la campaña la ausencia de las grandes figuras en la Vuelta y la marcha del sponsor dejaría en la calle a un corredor que, aún sin recalificarse, se pasó el año viviendo como un ciclista profesional. Sin excesos. Su amistad con Alberto Contador ha sido fundamental en su regreso a profesionales, no cabe la menor duda. Sin embargo, no habría que infravalorar a un corredor que se enfundará otra vez un maillot con tan sólo 27 años.

Pero como ya se ha comentado, el de Jesús Hernández no será el único regreso de un antiguo corredor de Manolo Sáiz la próxima temporada. Javier Ramírez Abeja, el 'pichichi' de la categoría amateur esta campaña vuelve al equipo de casa, el mismo que no le hizo hueco el pasado año, Andalucía - Cajasur. El de Carmona ha brillado con los ceutíes Ávila Rojas, el decano del pelotón élite sub23 que, desafortunadamente, no rodará por las carreteras el próximo año. Abeja no destacó sobremanera en su última campaña pro en Fuerteventura pero sus once triunfos de esta temporada le han servido para que Cabello le abriera las puertas de la élite.

Unas puertas que también se cerraron sorprendentemente para Óscar García Casarrubios. El manchego no llegó a formar parte de la estructura profesional de Manolo Sáiz pero sí se formó en Wurth, su filial en categoría amateur y desde donde han salido ciclistas tan conocidos hoy día como Alberto Contador, Luis León Sánchez o José Joaquín Rojas. El cierre de Relax le dejó en la calle, viéndose sin otro remedio que el de la vuelta al campo amateur. Portela y su SúperFroiz le abrieron las puertas y el resultado no ha podido ser más satisfactorio: victoria en las prestigiosas vueltas a Galicia y Comunidad Aragonesa. Xacobeo podría ser su destino.

Y no se crean que estos tres casos son los únicos. Los ex ciclistas de Liberty continúan purgando unas penas sin sanción que sí que les suponen un obstáculo a la hora de encontrar un contrato de trabajo. Koldo Gil, por ejemplo, llamó a las puertas de Euskaltel - Euskadi, un equipo al que no le vendría mal un corredor de sus características. ¿Respuesta? Portazo. Carlos Abellán optó por recalificarse en 2008, consiguió el título de campeón de España élite contra el crono pero la llamada no llega. Se encuentra en Costa Rica compitiendo en la Ruta de los Conquistadores junto a Roberto Heras. El bejarano sí cumplió los dos años pero, aún así, no encuentra el equipo que le dé la oportunidad que tanto tiempo lleva reclamando. Ni la publicidad del Diario Marca parece inmutar a los equipos y eso que hablamos todo un Roberto Heras. Ni con esas.

2 comentarios:

DANDY dijo...

Moraleja: En este vida hace falta padrinos.

Anónimo dijo...

Gran blog. Me ha gustado mucho como has explicado el para los aficionados "normales" (gente a la que le gusta el ciclismo pero tiene bastante con los tecnicismos de la profesión de cada uno y poco más)complejo y mutante sistema de organización del ciclismo internacional UCI. Claro y conciso. Seguiré echando un vistazo a tu blog. Los sambenitos vuelven a estar de moda, como en la España diociochesca.Los italianos perdonan y siguen amando a sus Idolos, aquí nos gusta arrastralos por el barro. como los alemanes(Ullrich) que ven más fantasmas en el doping que en su terrorífico pasado político. Increíble.Saludos, enhorabuena